Por: Rocio N.
Señor Candido Ochoa, como te atreves y tienes la desfachatez de regresar a San Luis, eres huasteco, eres muy diferente a los potosinos y traidor es tu sello.
Si bien es cierto, ocupaste cargos públicos si, pero como? Como tú sabes, con intrigas y cómo las víboras, arrastrándote con el respeto debido a las crótalas.
Tu paso por la Procuraduría no se borra ni se olvida, no se le olvida a todos los ministerios públicos que extorsionabas con los moches y obligándolos a realizar averiguaciones previas sin sustento, además de ser un mustio en la materia, tu complicidad con los zetas, todos muertos por cierto, al igual que tu jefe de escoltas, ocupaste a la procuraduría como órgano faccioso a modo tuyo y de Toranzo!
No se le olvida a Enrique Galindo la manera de como lo lograste quitar de Secretario de Seguridad Pública por tus intrigas chismes y celos, poniéndolo en mal con el ex gobernador Toranzo, mal endémico para todos los potosinos.
Robaste a manos llenas, te largaste de diputado para obtener fuero, pero ya no lo tendrás, tampoco se le olvida a Durón Santillán como lo grillaste como cobarde que eres por la espalda para que tu hipnotizado gobernador lo quitara, cuidado Durón es un hombre inteligente y se las cobrará, al tiempo.
Como tampoco se olvida de igual forma la manera que apuñalaste como es tu estilo cobarde a Marco Antonio Aranda, para finalmente quedarte en su lugar como te dije, solo arrastrándote como víbora que eres!! Candido das pena, das vergüenza! No eres más que un pobre diablo lleno de enemigos que a la vez te miran con lastima.
Pretendes ganarte respeto, después de que estuviste en contubernio en el Poder Judicial con el anterior Presidente Magistrado, a quienes por cierto también les pedías su moche !! No tienes vergüenza y vas a terminar en la cárcel, cuídate de más de tres! Son peligrosos de verdad!
No se con que cara vas a ver a la gente potosina después de tanto odio que generaste, tu cara de mustio ya no se la compra nadie, salvo que así la tienes, ya te esperamos con ansias tu llegada a tierras potosinas bienvenido.
Presentamos la nota bajo el amparo del artículo sexto constitucional
