Texto y fotos: Everardo González
Santa María de Río, S.L.P.- Fue una tarde de toros de triunfadores que terminó suspendida por la presencia de un aguacero… Pero podemos decir que el triunfo máximo fue la ganadería de Cerrito de Corzo, quienes al ruedo de la plaza de toros «Gregorio García» de Santa María del Río lidiaron 3 novillos de sobrada calidad, al cual los novilleros Luis Ignacio Escobedo y Paco Velásquez cortaron una oreja respectivamente.
Ante una entrada regular, abrió plaza ‘Tradición’ que correspondió en suerte a Luis Ignacio, quien no se acomodó con el capote. Con la muleta inició inteligente al darle largo y por abajo para después correr la mano con gusto y temple con el derecho, pues el de Cerrito de Corzo así se lo demandaba. Fue una faena larga en la que en solo una tanda instrumentó el cometido por el izquierdo con el que él no se acomodó por lo que básicamente fue una faena derechista. En su primer intento tras de la espada la dejó muy tendida, en la segunda tuvo mejor colocación.
El segundo de la tarde correspondió al de Portugal, Paco Velásquez quien no se acomodó a la verónica. Con la muleta luego de cubrir el segundo tercio con empeño, pegó mulléramos buenos y largos por el derecho, pues de otra vez así se lo demandó el novillo que fue de sobrada calidad, por lo que los pases del de Portugal conectaron con el respetable, armando de buena manera para ser premiado con el corte de una oreja.
El tercero que a la postre sería el último, llevó por nombre ‘Fiesta Brava’ con el que Luis Ignacio le echó valor dado que justo en ese momento el Dios Tlaloc hizo de las suyas, por lo que ente el agua y el lodo tuvo que abreviar sin embargo el novillo en el breve tiempo dejó ver calidad peleando en el centro del ruedo, al novillero se le otorgó un apéndice.
La nota mala la dio el juez de plaza, quien no le dio seriedad al festejo, parándose en una sola ocasión ante los novilleros y sentado en el biombo como si estuviera en una cantina.
