MIAMI.- San Antonio desaprovechó una ventaja por cinco puntos con 28 segundos por jugar pero una gran actuación de LeBron James y Ray Allen llevaron la serie al séptimo y definitivo encuentro al vencer Miami por 103-100 a los Spurs.
Lo de Duncan merece una mención aparte. A los 37 años llegó a esta temporada en una excelente forma física. Como en sus mejores tiempos. Con su paciencia y serenidad habituales fue el que mejor asimiló la importancia de este juego. San Antonio llegó match point a Miami y al menos él hizo todo lo necesario para llegar a un nuevo anillo.
Si por la edad sus rivales en el puesto (Chris Bosh, Haslem o Andersen) tienen una ventaja atlética sobre él, jamás se notó. Los dominó con clases de fundamentos: tiros cortos, a media distancia, volcadas, lanzamientos en 45 grados, empezando de espalda o jugando de frente al aro. Un verdadero show.
Lo más importante es que todo eso sirvió para mantener en juego a un San Antonio, que no tenía en la ofensiva con dos de los integrantes del Big Three, Tony Parker (4 puntos en la primera mitad) y Ginóbili (0). El primer tiempo terminó con ventaja de seis puntos para los Spurs (50-44).