ENTREGA SIN LÍMITES
Por: Rolando Jiménez
Continúa la gran polémica sobre la utilización de jugadores nacionalizados en la selección mexicana de futbol, por un extremo están los nacionalistas que proclaman que hemos sido mancillados en nuestro honor por utilizar a futbolistas nacidos en otro país y por el otro lado están los que no verían mal que nuestra selección hiciera un verdadero trabuco con jugadores venidos de otros rumbos.
Los antecedentes históricos nos llevan a 1935 cuando el futbolista peruano nacionalizado Julio Lores, quien jugara en el Necaxa, integró la selección mexicana que ganó la medalla de oro en los III Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe en la ciudad de San Salvador, habiendo sido la base el equipo electricista campeón. Después en 1937 jugó con México ante Estados Unidos, el español nacionalizado José López Herranz. El defensa argentino nacionalizado Antonio Battaglia del León jugó en el 1er. Torneo Panamericano en Santiago de Chile en 1952 con México.
Después en los años 60, el centro delantero argentino Carlos Lara que jugaba en el Zacatepec de 1a. División jugó con la selección mexicana en 1961, el partido eliminatorio final contra Paraguay, para asistir al Mundial de Chile 1962, al cual no asistió por una lesión, este jugador nacionalizado hizo una gran carrera en nuestro país, por este motivo sería apodado «El Charro».
En San Luis Potosí contamos en La Trinca Tunera con el jugador peruano nacionalizado Julio Ayón «Aparicio», quien así pudo jugar en el equipo de 2a. División en la temporada 1959-60 y recordar con cariño al primer jugador extranjero que jugó en 1a. División para un equipo potosino: el brasileño Carlos Gourgel «Bidón», que alineó ante el América en el debut en el Estadio Azteca en la temporada 1971-72. Antes de este juego oficial, varios extranjeros jugaron con el San Luis a manera de refuerzos en partidos amistosos: los brasileños Javan Marinho, Arlindo Dos Santos (primer anotador en el Estadio Azteca) y Enos Pereyra, como también el uruguayo Gisleno Medina. Varios jugadores nacionalizados actualmente fueron integrantes de los equipos potosinos: Ariel González, Diego Melillo, Héctor Giménez, Juan Zandona, Michael Orozco, Alfredo Moreno, entre otros.
En los años 70 se habló de nacionalizar al portero argentino Miguel Marín y al multi campeón goleador brasileño Evanivaldo Castro «Cabinho», para reforzar a una selección que había sido eliminada para el Mundial de Alemania 1974 y de quedar en el último lugar del Mundial de Argentina 1978.
Javier Aguirre como D.T. del seleccionado nacional llevó al Mundial 2002 Corea-Japón al nacido en Argentina: Gabriel Caballero, a quien había tenido en el Pachuca, tuvo poca participación (Croacia 1-0 y los minutos finales ante Ecuador 2-1 e Italia 1-1) y pasó con más pena que gloria.
Ricardo Lavolpe llevó para el Mundial de Alemania 2006 a los nacionalizados: Antonio Naelson «Sinha» de Brasil y el argentino Guillermo «El Guille» Franco, ambos jugaron en el triunfo 3-1 ante Irán, anotando un gol el brasileño (único gol de nacionalizados en mundiales). También lo harían ante Angola en el 0-0 y Franco ante Portugal 1-2 y Sinha contra Argentina en el 1-2.
Para el Mundial de Sudáfrica 2010, Javier «El Vasco» Aguirre llevó al centro delantero Guillermo «Guille» Franco y se convirtió en la polémica del seleccionado, al jugar mal y no anotar en ninguno de los 4 partidos, junto con Adolfo «El Bofo» Bautista que no tuvo fortuna al jugar contra Argentina en la ronda de octavos de final, para perder 1-3.
El balance para los seleccionados nacionalizados en las competencias mundialistas ha sido desfavorable, el eterno pero es que algunos seleccionados no terminan de dar el estirón o son reservas en sus equipos europeos y no tienen ritmo de juego, esto no les permite dar el rendimiento ansiado por los aficionados mexicanos, que esperan que ya superado el bloqueo mental, del «ya mérito» por el «si se pudo», se materialice en las eliminatorias y competencias mundiales.
Por supuesto para un jugador extranjero sin posibilidades reales de jugar como seleccionado en su terruño, es que tenga sobrado interés en participar con México y llegar a jugar en un Mundial, el sueño dorado de cualquier futbolista. La Globalización ha permitido que esto se vea más natural y los ejemplos en países europeos como Alemania, Italia, Holanda, Francia, Inglaterra, entre varios más que han abierto de par en par las puertas a los jugadores naturalizados, algunos basta con que alguno de sus padres tenga ascendencia de ese país para tramitar su doble nacionalidad e integrar al seleccionado, finalmente representan a las FEDERACIONES de futbol de un país y no el honor nacionalista de varios que se rasgan las vestiduras.
Mi posición personal ante el tema, lo planteo en tiempos: a CORTO plazo convocar a los futbolistas nacionalizados que anden bien, que jueguen en el medio campo como atacantes y sean mejores en este momento que los nacionales («Chaco» Giménez y Lucas Lobos), porque México ha carecido de gol en estas eliminatorias, la portería y la defensa no hay tanto problema. A MEDIANO plazo haría una reducción en la Liga MX a solamente 4 jugadores extranjeros, para bajar a 3 a LARGO plazo, con ello los equipos gastarían su presupuesto en mejores jugadores extranjeros, que vengan a aportar y mejorar el futbol nacional con su calidad y no los «bultos» que acostumbran a traer, que solo bloquean el desarrollo de los jóvenes mexicanos en las delanteras.
Mientras tanto que llegue la ENTREGA SIN LIMITE.