Hace algunos ayeres, el presidente del Atlético San Luis Jacobo Payán Latutf, se sinceró.
Quien ahora dirige los destinos del equipo profesional que juega en la división de ascenso del futbol mexicano reconoció que los gobiernos Estatal y Municipal no lo apoyan.
¿La aventura de tener un equipo en la división de ascenso podría terminar antes de tiempo?, ¿Se alejan los anhelos de muchos aficionados de algún día tener un equipo de primera división?
De todos es conocido que el Gobernador del Estado, Fernando Toranzo Fernández, no es futbolero. También es cierto que en los tiempos de Marcelo de los Santos Fraga el Gobierno del Estado llegó a regalar –porque no se le puede llamar inversión- 55 millones de pesos al año al Club San Luis, propiedad de Televisa.
Ese recurso superaba y por mucho lo que destinaba en el gobierno panista a la Coordinación Estatal de Pueblo Indígenas y de manera considerable lo que se le destinaba al deporte amateur. Es decir había más dinero para el Club San Luis que para los indígenas, mientras los representativos estatales del deporte amateur o juvenil pasaban penurias en cuanta competencia nacional enfrentaban.
De Toranzo Fernández no es de extrañar que no le quiera invertir al futbol. Si no se le invierte a otros rubros, mucho menos a un negocio llamado futbol…
En cambio, quien no deja la oportunidad de promocionarse es Mario García Valdez, mismo que no desaprovecha cámara fotográfica, de video, bodas, XV años, eventos de la universidad, deportivos, bautizos y un largo etcétera para promocionar su imagen de transformador del San Luis Potosí digital y donde no hay baches.
No se puede reprochar que el gobierno destine recurso público para una actividad recreativa como lo es el futbol; lo que se reprocha es el oportunismo político y mediático de tomarse la foto oficial y dar la patada inaugural cuando no se está apoyando una causa llamada futbol profesional o Atlético San Luis.
