6 febrero, 2025

La política juvenil desplegandose en nuevos escenarios

28 enero, 2015

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Isabe RDZ Padrón

Por: L.A.E. ISABELA RODRIGUEZ PADRÓN

“Nuestra importancia radica en el carácter dinamizador para generar propuestas dentro de los diferentes espacios de acción en los que podemos participar”.

La mentalidad de la juventud puede tener sus variaciones y sus perspectivas diferenciadas algunas confusas por la desinformación mediática sobre la realidad social de nuestro país. No obstante, al final, el criterio de la juventud puede ser asumido como altamente político, cuando su entorno social alienta un sentido crítico, proactivo, en el espacio en que cada uno interviene. El arte, la tecnología y el medio ambiente son esferas donde las y los jóvenes imponen su manera de pensar.

El primer tema que sale a colación cuando se habla de jóvenes y la política es sobre cuáles son los intereses de la juventud para movilizarse, y si la política conforma una motivación para ello no obstante hay un sentimiento generalizado de insatisfacción por la vida política, que sólo es la respuesta del desconocimiento juvenil sobre lo que la política representa desde su ideología hasta su fin. “El mayor castigo para quienes no se interesan por la política es que serán gobernados por personas que sí se interesan” Arnold Joseph Toynbee fue un historiador y filósofo británico que entre 1933 y 1961 escribió «El Estudio de la Historia», donde afirma que las civilizaciones prosperan siempre que dan respuesta a un desafío natural o social que se les presenta.

Por lo tanto, su decadencia se enmarca en la incapacidad de reaccionar frente a una dificultad. Pero quienes tienen la facultad de dar esta solución, no son precisamente las mentes tradicionales que han venido dirigiendo a la sociedad, sino que la respuesta debe venir de una conciencia nueva que, apartándose del manejo cotidiano, tenga ideas frescas para proponer alternativas diferentes a los nuevos desafíos.

La participación de la juventud política en México tiene su historia, sus hechos, sus penas, pérdidas y glorias, ha habido sangre joven que se ha derramado en suelo patrio. Pero sobrevive la esperanza de una fuerza latente en el desarrollo nacional, nos conduce a afirmar que el simple hecho de ser joven ya nos hace rebeldes y revolucionarios, y aquel joven que no es rebelde y no es revolucionario simplemente no es joven.

La rebeldía y el compromiso por el cambio nos hacen reflexionar y reiterar que hay viejos jóvenes y jóvenes viejos, patriotas y revolucionarios por su espíritu y su forma de pensar.

Sin lugar a dudas vivimos un momento histórico donde se están realizando profundos cambios, donde estamos remodelando la patria abandonada y en olvido. La evolución de la conciencia política en la juventud ha sido impresionante en los últimos años más aún para aquellos que suscribimos el compromiso con la «Revolución Ciudadana», al punto en que ya existe un debate, en algunos casos a breves rasgos y en otros a profundidad, un diálogo político convertido en un objeto movilizador y concientizador de la población joven de México.