San Luis Potosí, SLP.- El alcalde de San Luis Potosí, Xavier Nava Palacios, se quitó la careta de progresista y democrático al sumarse a un grupo de políticos e intelectuales “fifís” y de ultraderecha que pretende desestabilizar al gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Nava firmó un desplegado que resulta una amenaza para el bienestar de millones de mexicanos que votaron por un cambio verdadero, se coloca del lado equivocado de la historia con políticos impresentables que durante años recibieron privilegios del PRI y PAN, y ahora los han perdido por la acciones de combate a la corrupción y de austeridad que ha aplicado López Obrador.
Sin importarle que gobierna la capital potosina, que fue electo por miles de potosinos para que los representara con congruencia y honestidad, para que brindara mejores servicios públicos, seguridad, alumbrado y movilidad, ha decidido formar parte de una riesgosa aventura porque también se siente ofendido por las políticas y programas sociales de AMLO que enfatiza el apoyo a los que menos tienen, a los olvidados del PRIAN.
Planeado desde las sombras por Carlos Salinas de Gortari, el llamado grupo “Contrapeso” es encabezado por el gobernador “fifí” de Chihuahua, Javier Corral, que enfrenta observaciones federales por muchos millones de pesos y pretender evadirlas como líder de otros políticos como Guadalupe Acosta Naranjo y Fernando Belaunzaran, de una de las corrientes más corruptas del PRD, los “galileos”; el iluso y desorientado Luis Donaldo Colosio Riojas, hijo del asesinado Luis Donaldo Colosio Murrieta; la salinista de “izquierda fifí”, Cecilia Soto; el panista Gustavo Madero; el falso humanista Emilio Álvarez Icaza; la lépera panista Xóchitl Gálvez, el periodista salinista Raúl Trejo Delarbre, entre muchos otros que dejaron de percibir millones de pesos de la Presidencia de la República.
Nava como los demás firmantes del desplegado están en contra de que AMLO entregue becas laborales a los jóvenes, pensiones a los adultos mayores, que entregue despensas básicas a las familias pobres; que haya bajado los sueldos a los funcionarios, magistrados y gobernadores, que haya eliminado los millones de pesos que recibían los periodistas y medios corruptos; también se sienten agraviados por el combate a los huachicoleros que financiaban las campañas de los candidatos del PRI y el PAN.
A Nava y sus aliados les duele sobre todo la austeridad republicana, por eso su verdadero objetivo es darle un golpe de estado al presidente AMLO, mientras simula que gobierna la capital potosina de lunes a viernes, se dedica a conspirar contra la Cuarta Transformación y salió del clóset al considerarse el primer “fifí” de San Luis Potosí.
