San Luis Potosí, SLP.- Adentro, en la Sala ya estaban los abogados de la defensa, Rafael Aguilar Hernández, Héctor Vega Robles y Marco Polo Méndez. En medio de un caos administrativo en el que el Operador de la Sala ordenaba los documentos y credenciales.
La parte ofendida, por medio de la Fiscalía y su asesor el abogado Alfredo López Montante, solicitó se realizara una audiencia privada, es decir, que excluyeran a los medios de comunicación que logramos acceder a la audiencia, después de casi una hora de debate, el Tribunal negó el primer incidente, y la audiencia siguió de manera pública.
El abogado Héctor Vega, defensor de Cayeyo tomó la voz, y en todo momento mostró dominio en el juicio, solicitó diversas incidencias que pusieron en jaque a la Fiscalía, como la regulación del procedimiento con base en una sentencia dictada por la Quinta Sala el 17 de julio del 2018, en el que se desestimaba el auto de vinculación del Juez de Control, este incidente fue negado por el Tribunal, pero el desarrollo duró casi tres horas.
La defensa en voz de Vega Robles solicitó la ilicitud en el acto de investigación, respecto al aseguramiento del inmueble ubicado en el Club Campestre donde presuntamente se suscitaron los hechos y la diligencia de cateo realizada el día 9 de mayo del 2017. Alegando la defensa que no fueron solicitados para dicho cateo a los defensores, por lo que las pruebas que de esa diligencia se desprendieron no pueden tomarse como legítimas y certeras, refiriéndose a dictámenes dactilares, de criminalística, de genética forense, entre otras. De nuevo, el Tribunal negó la razón a la defensa.
Después fueron enlistados los testigos de ambas partes, la defensa mencionó al Fiscal General y al Director de la Ministerial en los primeros lugares, mientras que la Fiscalía los dejó casi al final.
La jornada duró cerca de 12 horas, el Tribunal se notaba agotado, la Fiscalía nerviosa al tener que consultar varias veces leyes y jurisprudencias por las diversas incidencias que la parte de la defensa realizó. Cayeyo, confiado en sus abogados, respondió las preguntas sin titubeos, era el más relajado en aquélla Sala.
En este primer debate la Fiscalía se vio “corta” ante la estrategia de la defensa que mostró el gran conocimiento que tiene en el derecho penal.