En el arranque a su elección dio parte su discurso en español
El jueves 8 de mayo de 2025, tras cuatro rondas de votación en la Capilla Sixtina, los 133 cardenales del cónclave anunciaron la elección de Robert Francis Prevost como el nuevo Papa de la Iglesia Católica. Con 69 años, Prevost se convierte en el 267.º sucesor de San Pedro y el primer pontífice estadounidense en la historia. Su nombre papal será León XIV.
¿Quién es Robert Prevost?
Nacido el 14 de septiembre de 1955 en Chicago, Illinois, Prevost es miembro de la Orden de San Agustín. Su formación académica incluye estudios en Ciencias Matemáticas, Filosofía y Derecho Canónico. En 2015, obtuvo la nacionalidad peruana, reflejando su profundo vínculo con América Latina. Su labor misionera comenzó en Perú en 1985, donde desempeñó funciones pastorales y formativas en Chulucanas y Trujillo. En 2014, el Papa Francisco lo nombró obispo de Chiclayo, cargo que ocupó hasta 2023. Ese año, fue designado prefecto del Dicasterio para los Obispos y presidente de la Pontificia Comisión para América Latina, roles que desempeñó hasta su elección como Sumo Pontífice.
Un Papa con mirada global
La elección de Prevost marca un puente entre el norte y el sur global, y se espera que su liderazgo combine tradición y renovación en la Iglesia Católica. Su dominio de varios idiomas y su experiencia en América Latina le otorgan una perspectiva única para abordar los desafíos contemporáneos de la Iglesia.
Reacciones y expectativas
La noticia ha generado gran expectación en todo el mundo. Fieles y líderes religiosos esperan que el Papa León XIV impulse una Iglesia más inclusiva y comprometida con los problemas sociales y espirituales del siglo XXI.
La elección de un Papa estadounidense, especialmente uno con profundas raíces latinoamericanas, refleja la creciente globalización de la Iglesia Católica y su apertura a diversas culturas y realidades.
Con su elección, el Papa León XIV asume la responsabilidad de guiar a la Iglesia Católica en tiempos de desafíos y cambios, con la esperanza de renovar la fe y fortalecer la unidad entre los fieles de todo el mundo.
